Faros Islas Baleares

Plan Especial de los Faros de las Islas Baleares

El plan especial de los faros de las Islas Baleares nace con el objetivo principal de formular un proyecto territorial sostenible para el conjunto singularísimo de los faros del archipiélago balear, partiendo del compromiso conjunto de la protección del patrimonio histórico que constituyen  los faros y del desarrollo económico y humano equilibrado y ambientalmente responsable.

Los faros son un elemento arquitectónico de alto valor histórico y cultural y, al mismo tiempo, son articuladores del paisaje único y extraordinario en el que se sitúan. La estrecha relación que generan entre el espacio terrestre y marítimo les confieren un poder simbólico excepcional en el territorio y en la conciencia social.

El plan especial nace con una voluntad integradora del conjunto de políticas territoriales, medioambientales, culturales y sectoriales que se conjugan en torno a este singular elemento de señalización marítima que es el faro.

Para la redacción del plan se ha partido de la identificación de varios problemas que es necesario solucionar y que tiene como objetivos fundamentales los siguientes:

– Establecer un plan integrador que busque soluciones conjuntas  para la totalidad de los faros como sistema general portuario y al mismo tiempo sensible a las particulares de cada uno;

– Conseguir un plan sectorial autónomo que al mismo tiempo sea coherente y respetuoso con la ordenación territorial municipal e insular;

– Garantizar la preservación del patrimonio arquitectónico que constituyen los faros toda vez que estas instalaciones han perdido su funcionalidad técnica;

– Redactar un documento que tenga como pilares básicos la sostenibilidad ambiental, social y económica.

Como alternativa viable racional a estas cuestiones se propone la elaboración de un plan supramunicipal que identifique los faros como sistema general portuario afecto a la señalización marítima que sea capaz de establecer unas condiciones uniformes propias de su caracterización sectorial supramunicipal y, al mismo tiempo, un plan conciliador y coherente con el Plan Territorial Insular de cada isla y su normativa específica en función del tipo de suelo en el que se encuentra y la protección ambiental que le caracteriza e igualmente con los distintos planes urbanísticos y ambientales municipales con los que debe de articularse.

El plan promueve también la declaración de los faros como patrimonio arquitectónico singularísimo con el objetivo de preservar su alto valor histórico y cultural y con ello garantizar la conservación, habida cuenta de la pérdida de su funcionalidad técnica que, a día de hoy, ha sido sustituida por modernos sistemas de señalización que no requieren el espacio que antiguamente requerían los faros para su correcto funcionamiento.

En este marco el plan propone también un desarrollo urbanístico orientado hacia la sostenibilidad en su acepción más amplia.

Se contempla en primer lugar la sostenibilidad ambiental del faro y su entorno inmediato. De acuerdo con este principio de sostenibilidad ambiental el plan renuncia deliberadamente a cualquier ampliación de las instalaciones de los faros independientemente del uso al que puedan destinarse. Se trata únicamente de conservar las instalaciones actualmente existentes evitando cualquier uso especulativo del suelo. Por otro lado se ha planteado también un plan que proponga un uso alternativo para los faros que trascienda su percepción únicamente durante la época estival ya que es una imagen distorsionada de la realidad de estos elementos que ofrecen un amplio margen de posibilidades en su concepción desestacionalizada.

La sostenibilidad social se ha concebido desde la perspectiva de la participación pública y privada desde la misma concepción del Plan Especial y a lo largo de su redacción.  Para ello se ha planteado trascender el mero proceso de información pública recogido por la legislación urbanística vigente y se ha iniciado la redacción del Plan desde el consenso con todas las administraciones implicadas, realizando una serie de mesas informativas y de toma de decisiones en relación con cada uno de los faros integrantes del Plan Especial tanto a nivel municipal como del Consell y del Govern.

Por último, la sostenibilidad económica debe imperar en toda la actuación, de cara a garantizar la viabilidad de la conservación y el mantenimiento de estos bienes integrantes del Patrimonio, y no puede resultar gravosa para las haciendas públicas. En este sentido se ha propuesto un plan lo más abierto posible en cuanto a la diversidad de usos admisibles sin perder de vista el resto de objetivos y condiciones señaladas. Se propone establecer un conjunto de usos que profundice en la conveniente relación público/privado para que pueda garantizarse la viabilidad económica de la gestión y la conservación y el mantenimiento de los faros. Profundizando en este sistema de gestión mixta que combina los intereses públicos y privados, la Autoridad Portuaria propone a través de este plan un sistema de concesiones de tal manera que la propiedad  de los faros se mantenga en manos públicas con la intención de garantizar una gestión adecuada y tutelada en la que prevalezca el fin público último.

Se trata de un plan muy ambicioso que pretende establecer una ordenación sectorial de una infraestructura territorial  cuyos objetivos trascienden la mera utilidad pública de los bienes y su protección, para realizar un planteamiento desde una perspectiva ambiental y social sin precedentes en el planeamiento. Se trata de un plan ejemplarizante cuya naturaleza fundamentalmente técnica no le impide concebirse con la voluntad de ser social y ambientalmente armónico con su entorno y que es fruto del consenso entre todos los agentes que pudiesen sentirse afectados.